NOCHE DE PAZ...¿NOCHE DE AMOR?

Las fiestas navideñas suelen ser fiestas de amor y alegría pero con frecuencia también son las fechas perfectas para que las parejas entren en conflicto. Cenas familiares, suegros, cuñados, tomar decisiones del tipo con quiénes cenamos y en qué fecha... puede terminar siendo agotador para la paciencia y generando conflictos y sinsabores.

Para que puedas disfrutar con alegría al lado de tu pareja y dejar atrás incomodidades, discusiones, problemas y dejar de tener cuerpo de alarma, te doy unas pequeñas ideas para que, juntos, sigáis compartiendo lo positivo de estos días de celebración:

 

• La decisión de con quién pasar las fechas señaladas es importante tomarla de forma que ambos estéis cómodos con  el resultado. Tratad de llegar a un acuerdo equitativo. Turnarse cada año con una familia, por ejemplo.
• Escucha y se flexible. Si no se está cómodo en casa de nadie, propón tu propio hogar.
• Relájate con las "costumbres navideñas". Para tí puede no ser importante pero para tu pareja sí. Trata de unirte en la medida de lo posible y sobre todo disfrutarlo o, al menos, dejar de quejarte.
• Respeta los tiempos que tu pareja utiliza en el arreglo personal y se paciente. Si tienes hijos programa algún tipo de actividad o juego para que no se aburran o te desesperes.
• Reservad unos días o unas horas para vosotros solos. A veces puede ser interesante viajar y pasar las fiestas lejos de casa, pero puede que aunque os guste no sea lo que queréis hacer ambos cada año. Poneos de acuerdo para dejar a los familiares y disfrutarlo al máximo los dos. Por ejemplo, pasar la Nochevieja en privado. Una cena romántica. Una escapada en pareja que os desconecte de la rutina...
• Si te gusta la decoración, intenta implicar a tu pareja para que sea divertido y compartido por ambos. Pero si siente rechazo, dájale y respétale y al menos pregúntale qué le gusta y qué no y sobre todo... ten en cuenta lo que te dice.
• Cuidado con el tema económico. La tendencia a despilfarrar de estos días con regalos, cenas y lujos que no nos permitimos en otros momentos, puede provocar conflictos y situaciones tensas. Generar un presupuesto común. Que tus decisiones te acerquen a tu pareja y no al contrario, sacando el historial de aportaciones económicas desde el principio de vuestros tiempos.
• Tómate con paciencia las "discusiones familiares". Solo son unos días. Sobrelleva con mano izquierda la situación intentando no generar conflicto ni angustiarte. Podéis pactar "discusión cero" con la familia del otro: "No te digo nada de tu madre y tú te callas con el cuñado".
• Tomaros algún día para hacer algo nuevo juntos y salir del cansancio del ajetreo de estos días.

Así, que ya sabéis, mucho amor, paciencia y comprensión para pasar unos ratos divertidos con la familia. A fin de cuentas no la podéis cambiar. Si váis a compartir tiempo, es mejor hacerlo con una actitud positiva desde el principio. Seguro que revierte favorablemente en la relación entre los dos.

¡Suerte!